lunes, 13 de diciembre de 2010

Una pequeña historia, que comienza aqui.


Que sentido tiene la vida, cuando la transitamos y no valoramos lo poco o mucho que nos ofrece, estamos realmente conformes con nuestro pasado, estamos obrando bien en nuestro presente, realmente estamos abonando buenos caminos hacia el futuro, tu futuro, nuestro futuro.
Desde que somos niños las primeras personas que están en nuestro entorno son nuestros padres, hermanos y familiares directos, las primeras imágenes y enseñanzas provienen de ellos, al menos que uno recuerde, desde que tenemos uso de razón y nuestra memoria no importa el pasar del tiempo aun recuerdan los momentos que marcaron nuestros inicios y lo que hoy somos como personas, es decir aprendimos valores y antivalores, ejemplos buenos y malos, unos crecimos con privilegios y otros con muchos sacrificios, que mas da, si lo importante para nuestros representantes era mantener y formar un niño sano, que estudiara y rindiera, Formar un hogar o una familia en apariencia equilibrada y unida. Pero a donde quedo la inocencia del niño, la libertad, el derecho a participar y opinar, el derecho a crecer sano, crearle buenos hábitos y valores, inspirarles seguridad y respeto, amor, amistad y confianza, para formar un ser sin complejos, sin temores  y seguro de si mismo.
Esta imagen es la casa de Mi Difunto Abuelo Jose Quintin Lopez, fundador o uno de los primeros pobladores del Barrio Isaias Medina Angarita, lo que es hoy La calle Plaza, sector la casilla. año 1968

La etapa mas importante de nuestras vidas, nuestra Infancia, ya que se trata de nuestros inicios, donde quedan sellados y perpetuados nuestros recuerdos bonitos y tristes, en realidad no importa cuantos años tengamos ya como adultos, siempre seguiremos siendo niños y esos recuerdos estarán con nosotros, a quien no le gusta mimar a un niño, jugar con el, disfrutarlo, reírse con ellos, pero también debemos preguntarnos si le exigimos a nuestros hijos portarse bien, ¿Qué estoy haciendo yo, le estoy dando buenos ejemplos, que tan bien me estoy portando con ellos?, en realidad les estoy respetando su tiempo, su espacio y su infancia. Mis decepciones, mis fracasos, mis rencores los estoy realmente apartando en el momento en que se acercan a mi en busca de amor, cariño, consuelo o estoy descargando mis penas con ellos, maltratándolos, reprendiéndolos porque no los soporto, porque son tremendos, los castigo, los atemorizo, para estar seguros de que me respeten. Que falta tan grave, creer que actuando así nos podrán respetar, así lo que sentirán esos niños es miedo a la presencia de quien los maltrata y los grita, difícilmente tendrán confianza en uno, crecerán agazapados y presionados, desarrollándose en ellos ese grave comportamiento de REVELDIA, porque existe y se adapta a la mentalidad de ese niño que va en crecimiento a una etapa aun mas difícil como la Adolescencia, porque si me porto bien me regañan, entonces voy a empezar a portarme mal de verdad para llamar la atención, no voy a estudiar mas, no me importa la paliza o cuanto tenga que llorar, he ahí que hoy tengamos tanta descomposición social, revisemos estadísticas actuales de la taza de mortalidad de jóvenes que no llegan hasta los 25 años de edad, sin contar los niños que mueren por causas de enfermedades genéticas por efectos del alcohol o drogas, familias en desgracia, niños en pobreza extrema, niños abandonados en la calle, aspirantes sin desearlo a ser futuros delincuentes, madres solteras desde 13 años en adelante que no tienen atención psicológica y pre natal o familiar. Los niños no tenemos la culpa, dirán más de un niño en su mentalidad, en su soledad y su inocencia, no pedimos nacer, no tuvimos la culpa de una mala planificación, ahora no me desean y me quieren prohibir el derecho a la vida, Mis padres al pelear y agredirse verbal y físicamente delante de mi, no comprenden del grave daño que me hacen, acaso soy yo el culpable de sus problemas de adultos, o porque cosa pelean que yo no los entiendo, si ellos no me quieren, entonces quien de verdad me va querer, quien me va a comprender, quien me podrá ayudar.
Que difícil verdad?  Crecer con todo esto a cuestas, me pregunto cuantos niños de familias pudientes y de alta sociedad, les respetaron su infancia, porque al niño rico, le dieron todo, lujos, los mejores juguetes, fue el trofeo de exhibición, el de las mejores notas, el que tenia que ser mejor que los demás niños, al que le impusieron desde pequeño la conducta altiva y prepotente (la arrogancia), a no tener modestia, ni mucho menos humildad, pero hasta en las familias mas pudientes existen problemas de pareja, problemas de carácter y conductas que igualmente marcan el crecimiento y la futura personalidad del niño. Seamos estudiosos de las noticias, de los sucesos, de los abusos contra los niños, de las estadísticas que tenemos actualmente en el crecimiento de la violencia, como o en que podemos contribuir para un mejor vivir y compartir, estamos realmente conscientes de que están haciendo nuestros hijos y como los estamos formando.

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